
él llega y se sienta. pide un cenicero y un cortado doble. saca el diario y un lápiz para hacer el puzzle. enciende el cigarro y bebe un sorbo de café. al rato llega ella. llama al garzón, ella va a pedir, pero él la interrumpe: "cortado chico descremado", pide. ella se guarda el aliento, saca un cigarro con boquilla, lo enciende y lo deja humear en el cenicero. se mira en un espejo de mano. llega el café. "gracias", dice ella, "¿y la soda?", dice él. ella lo mira y luego mira al garzón como ofreciéndole disculpas, como sintiendo vergüenza, como diciéndole "pucha, qué le vamos a hacer". el cigarro humea, el café baja, por atrás, como una escenografía dinámica, la gente pasa y pasa sin parar. acá en la mesa ninguno se habla, ella mira por sobre el hombro de él, perdida en un horizonte interrumpido por edificios, él se pierde en un puzzle demasiado difícil y blasfema por lo bajo. él se acaba el café, pide la cuenta y se va, ella todavía no termina, y sólo mira cómo se va, cómo se fue, sin decirse nada, ¿para qué? de todos modos se verán nuevamente, siempre lo hacen, siempre lo han hecho. acaba su cigarro y guarda la boquilla, saca su espejo de mano y se mira en él, las arrugas en la cara no desaparecen su belleza. guarda el espejo, da un último sorbo a su café y se levanta, sonríe al garzón y le da unas monedas, camina en dirección a su marido, no vio por dónde iba, pero sabe adónde fue, es su horizonte perdido tapizado de edificios, su promesa adolescente: "quiero llegar a viejito contigo", le había dicho. ella todavía lo recuerda.
foto: alterna
3 comments:
based on a true story...
a la sra. magdalena y al pelmazo de su marido
ahora soy:
emmadangers.blogspot.com
=)
yo encuentro super jarcor querer llegar a viejito con alguien. creo que nunca he conocido a alguna persona con la que me gustaría llegar a anciana.
saludos daniboy, nos vemos la otra semana :)
te quero.
Post a Comment